Li Ching Yuen (Lǐ Qīngyún) o Li Ching Yun fue un maestro taoísta chino, experto herbolario, curandero, practicante de Chi Kung (Qigong) y de artes marciales, asesor táctico del gobierno chino.
Algunas fuentes chinas afirman que vivió hasta la edad de 256 años, supuestamente, el hombre más viejo que haya existido en el mundo (todavía por confirmar), superando con creces al más
largo de vida útil confirmada, de 130 años el hombre indio, Habib Miyan.
Li Ching Yuen nació supuestamente en 1677 en la provincia de Szechuan, en el pueblo de Xian Qi Jiang. Según su relato, nació en 1736, por ende vivió 197 años. Sin embargo en 1930, el profesor Wu
Chung Chieh de la Universidad de Chengdu halló unos documentos de la china imperial donde registraba que en 1827, el gobierno felicitó Li Ching Yuen por su cumpleaños número 150, todo un record,
lo mejor es que al final del registro había otra felicitación por cumplir 200 años en 1877, encontrando registros que nació en 1677. Según la historia Li Ching Yuen, a temprana edad emprendió la
búsqueda de la longevidad recolectando hierbas y viajando, su primer siglo lo pasó vendiendo hierbas recogidas por otros.
A la edad de cincuenta años cuando Li Ching fue a las montaña para recoger algunas hierbas se encontró con un viejo ermitaño en las montañas que le enseñó Baguazhang, un conjunto ejercicios de
Qigong con instrucciones sobre la respiración, la formación de movimientos coordinados con sonidos específicos y recomendaciones dietéticas. Según Da Liu, discípulo de Li Ching, su longevidad se
debía al hecho de que realizaba los ejercicios todos los días con regularidad, correctamente y con sinceridad. En 1749, cuando tenía 71 años de edad, se trasladó a Kai Xian para unirse al
ejército chino como maestro de artes marciales y como asesor táctico.
En un artículo publicado en una página del diario The New York Times, se informaba sobre su increíble vida y se citaba la respuesta que tenía Li al secreto de su larga vida:
"Mantén un corazón tranquilo, siéntate como una tortuga, camina rápido como una paloma, y duerme como un perro".
Sostuvo que la calma interior y la eliminación del pensamiento son las drogas para hacer circular el “Gran Elixir”. Su dieta se basaba en arroz y vino. También consumía gingseng y una planta
poco conocida, la Centella Asiática (Hydrocotyl asiática).
Jules Lepine, bioquímico francés, viajó a China y estudió sobre la planta. En ella, encontró un poderoso alcaloide de efectos rejuvenecedores en su semilla.
Según todos los datos que se puede encontrar, parece que Li Ching Yun consumió sobre todo una dieta de plantas silvestres y frutas. Existe evidencia de que comía pescado con frecuencia y de vez en cuando carne de animales silvestres. (Alrededor de dos veces al año). Las hierbas que se consumió regularmente fueron Shou Wu, el ginseng, Centella Asiática, Dang Gui, Cao Gan y Gou Qi Zi (Wolfberries).